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La mirada Subterránica

¿Por qué ha fracasado el rock colombiano? Un análisis sobre la escasez creativa y la calidad musical del género en el país.

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Afirmar que existe algo llamado “rock colombiano” o incluso “rock latino” es adentrarse en aguas turbulentas en donde la subjetividad cobra mucha fuerza y se impone ante la razón o el conocimiento, el rock, al no tener un patrón rítmico definido se da para muchas interpretaciones y es “adaptable” a las necesidades, sin embargo, no podemos hablar de “rock colombiano” más que refiriéndonos a la música que se crea en el país dentro de este género. Hacerlo de otra forma sería como referirnos a “Vals jamaiquino” y no por ello el género va a cambiar, todos conocemos el patrón rítmico del vals y así se haga en Jamaica o en Viena será lo mismo, he ahí la razón del problema tan grande cuando pensamos en el “rock”, no existe (repito) un patrón rítmico general.

Pero si podemos a la luz de las evidencias pensar que tal vez el rock hecho en Colombia fracasó en su misión de crearse en una industria auto sostenible y de alcanzar fronteras más allá de las nuestras, mientras varios países tienen a sus movimientos consolidados y girando, Colombia nunca pudo salir de Rock al Parque y de un pequeño circuito de bares que se hizo más pequeño ante la cantidad de bandas que están tocando, bandas que en Bogotá superan las tres mil en número pero que viven invisibles y sin poder hacer más que ensayar de vez en cuando. Para concluir la idea, el rock colombiano se quedó en el garaje y la única oportunidad para una banda es clasificar como contratista a una convocatoria del estado o auto financiar giras al exterior. Gracias a eso, se ha dado un fenómeno muy interesante: la corrupción en el rock y sus políticas culturales, sus aliados y su ecosistema, tanto público como privado.

Es difícil atribuir una sola razón al fracaso del rock colombiano, ya que hay varios factores que podrían haber contribuido a ello. A continuación, podemos abordar algunos para analizarlos:

Falta de apoyo de la industria musical: El rock colombiano nunca recibió el mismo nivel de apoyo de la industria musical que otros géneros más populares como el Vallenato o la música popular, ni siquiera cuando el rock era lo popular, esto seguro fue una causa del estancamiento, en Colombia el rock siempre ha sido mal visto por la sociedad y nunca fue tomado en serio como si se hizo en otros países que vieron en el género un negocio, en realidad en Colombia jamás se escuchó el rock, mientras en el mundo se daban movimientos como la nueva ola del heavy metal británico, el glam, el punk, etc. En Colombia se consolaban con Vilma Palma e Vampiros y otras bandas que hacían parte de una lista de lo que llamaron “rock en español” pero que distaba mucho de lo que sucedía en el mundo. La industria musical no le puso atención al fenómeno y las disqueras no prensaron trabajos ni los promocionaron, muy pocos trabajos fueron prensados y muchos menos fueron apoyados en radios mainstream o en televisión.

La influencia del rock internacional fue muy poca: La popularidad de la música internacional, especialmente la música angloparlante no fue algo grande en Colombia más que para algunos nichos, las bandas que hacían rock tenían que rebuscarse los sonidos, en ese caso era muy difícil y aun lo es, encontrar profesores o músicos que dominaran las técnicas en las guitarras, en el bajo, generalmente el bajista era el que menos guitarra tocaba. Es difícil y caro conseguir instrumentos, el rock es una profesión que requiere inversiones altas y cuando ya en el país hubo instrumentos, salas de ensayos y una buena educación en técnicas gracias a Internet y sus tutoriales, la industria de la música ya había muerto en general, es decir el rock ya estaba absolutamente nulo en el país.

Falta de infraestructura musical: El rock colombiano pudo haber enfrentado dificultades para establecer una infraestructura musical adecuada, como salas de conciertos y estudios de grabación de alta calidad, lo que podría haber afectado su capacidad para producir y promover su música. Son muy pocos los discos que no suenan como si los hubiera mezclado un ingeniero experto en cumbia, la distorsión y la mezcla siempre han sido un problema, nunca hubo educación en estos ámbitos hasta hace muy poco y de nuevo, cuando ya lo tuvimos, ya no se grababa en estudios sino en casa, la producción musical del rock en general es muy pobre.

Estatismo paternalista: La necesidad y el hambre, la falta de escenarios pagos, la falta de gusto del público actual por el género entre otras cosas han hecho que sea el estado quien se posesione como “el gestor del rock nacional” y tiene sometidos y domesticados a los músicos de rock a punta de convocatorias y ayudas que prometen el dinero que no pueden ganar de otra manera, así entonces convirtieron al rock colombiano en una disidencia controlada, en algo inofensivo y maleable.

Personalidades egocéntricas y destructivas dentro de la escena: Es cierto que para ser rockero no hay que ser académico, estudiar música no es una necesidad para dominar las técnicas de ejecución más avanzadas o para componer buenas canciones. El estudio es necesario para desarrollar otras competencias como las practicas del fracaso, la aceptación de la crítica y el pensamiento crítico para poder debatir. La gran mayoría de los músicos de rock colombiano presentan conductas egoístas, ególatras, destructivas y muchas veces hasta delincuenciales.

Hemos vivido en carne propia el desprecio de algunos músicos cuando se trata de premiarlos, abrir espacios de circulación o promoción o incluso de agremiarse, dentro de la escena hay personas despreciables y desgastantes que solo piensan en el beneficio propio y en arrancar de las manos de quien tenga algún apoyo o las oportunidades para tenerlas en su bolsillo. Además, la ignorancia en temas y teoría artística se tomó los puestos de los gestores culturales quienes han contribuido a literalmente destruir la escena.

Ahora, hablando del gobierno en este país y su postura respecto al rock, hay que abordarla de varias maneras, sin duda tendremos que hablar de un agente que en un principio fue un factor de crecimiento pero que desde principios de siglo se convirtió en un evento de división y de corrupción: Rock al Parque, el festival más importante del país y el más grande que se financia con dineros públicos, es una política cultural y es patrimonio de Bogotá.

Pensemos en algo, no hay razones evidentes para afirmar que al gobierno le conviene que el rock no exista en Colombia o que quisiera acabarlo o que incluso le molestara de alguna manera. De hecho, el gobierno ha apoyado a diversos artistas y bandas de rock en el país a través de programas de financiamiento, festivales de música y otros esfuerzos de promoción cultural, el pecado del gobierno es que desconoce que sucede al interior de estas políticas y esfuerzos por el rock, ellos solo aprueban el presupuesto y dejan la ejecución en manos de agentes corruptos y con poca o nula educación en música.

Es posible que, en algunos casos, las autoridades gubernamentales hayan censurado o limitado la difusión de ciertas canciones o mensajes en el rock, como ha ocurrido en otros países, por motivos políticos o morales o sencillamente a capricho de algunas figuras que influyen en la escena. Sin embargo, esto no implica que el gobierno en general tenga una postura anti-rock o anti-cultura, sencillamente es incompetencia.

Entonces una de las metas de todo rockero en el país es tocar en Rock al Parque, que es un festival de música gratuito que se realiza en Bogotá y que ha sido uno de los eventos culturales más importantes del país durante más de 25 años y que, aunque su nombre incluye la palabra “rock”, el festival ha ampliado su oferta musical para incluir otros géneros y artistas a capricho de su curador y de algunos amigos que tienen como negocio el booking de bandas internacionales.

La inclusión de artistas y bandas que no son de rock en Rock al Parque puede tener varias razones entre las cuales dentro de un análisis “subjetivo” podríamos decir que se quiere ampliar la oferta musical o reflejar la diversidad musical de Colombia, pero si esto fuera cierto se podría manejar de maneras diferentes, Rock al Parque se convirtió de una excelente plataforma para artistas emergentes en los noventa, al bolsillo personal de algunos personajes corruptos eternizados en un instituto creado en la segunda década del siglo XXI llamado Idartes y que tiene practicas bastante deshonestas ya ampliamente denunciadas y conocidas por la opinión pública. Sin embargo, ha logrado salir impune ante todo y continúa funcionando.

No necesariamente sería corrupción poner a tocar bandas que no sean de rock en un festival llamado “Rock al Parque”, siempre y cuando la selección de artistas se base en criterios justos y transparentes, y se busque promover la diversidad y la calidad musical.

Pero en el caso del festival, en general hay una selección injusta de artistas y se realizan vetos a artistas de rock en detrimento de otros géneros como la cumbia o el pop electrónico, entonces sí podría considerarse como corrupción. La corrupción en la selección de artistas implica el uso de influencias indebidas para obtener un beneficio personal o para favorecer a ciertas personas o grupos en detrimento de otros.

La transparencia en la selección de artistas y la aplicación justa de criterios de calidad y diversidad musical son esenciales para garantizar la integridad del festival y su función como una plataforma de promoción y apoyo a la música. Si los organizadores del festival toman decisiones injustas y arbitrarias en la selección de artistas, y se favorece a ciertos géneros en detrimento de otros, entonces se estaría violando los principios de equidad y justicia que deben guiar cualquier política cultural.

Se ha comprobado ya por parte de la contraloría que ha habido corrupción en algunos procesos de contratación en Idartes y es bien sabido que la selección de artistas es manipulada por su curador, el cuál siempre ha salido impune ya que el distrito maneja la figura de “contratista”-
Entonces, si los organizadores de Rock al Parque intentan evadir su responsabilidad y culpar a un contratista, es importante tener en cuenta que la responsabilidad última recae en los organizadores del festival, ya que ellos son los encargados de supervisar y garantizar que todas las actividades relacionadas con el festival se lleven a cabo de manera adecuada y en cumplimiento de las leyes y regulaciones aplicables.

Si bien es cierto que los organizadores pueden contratar a terceros para llevar a cabo ciertas tareas, como la selección de artistas, la supervisión y control de estas actividades sigue siendo responsabilidad de los organizadores. Por lo tanto, si se descubre que ha habido corrupción en la selección de artistas y los organizadores intentan culpar a un contratista, podrían ser considerados cómplices o negligentes en la comisión del delito, y enfrentar consecuencias legales, pero esto es Colombia y es el país en donde un juez rechazó una tutela bajo el argumento de “que no sabía lo que era el rock” y por eso se declaró incompetente.

La falla acá entonces es de la procuraduría, ya que, a pesar de haber encontrado evidencia de corrupción, no toma medidas para sancionar a los responsables, así que está fallando en su deber de garantizar la integridad del servicio público y prevenir la corrupción.

Y sucede que el músico vive en necesidad y se acopla a lo que papá estado le dice, así que, si Rock al Parque dice que la cumbia es rock, el rockero no exige o pelea por sus derechos, sino que busca la manera de encajar y sonar a cumbia eléctrica, esto ha sido una de las grandes causas del fracaso del rock colombiano como género, porque sencillamente no se está haciendo rock.

Es difícil hacer una generalización sobre los músicos de rock que acceden a incluir otros géneros en su música o participar en festivales que no se centran exclusivamente en el rock. Cada músico tiene su propia motivación y razones para tomar decisiones relacionadas con su carrera y su arte.

Sin embargo, en general los músicos de rock deberían tener en cuenta la importancia de mantener la integridad de su género y su arte. Si los músicos de rock comienzan a incluir otros géneros en su música solo por dinero o para participar en un festival, esto podría afectar la calidad y la autenticidad de su arte y eso es lo que hemos visto año tras año, festival tras festival, encuentro tras encuentro. Mucha hambre, mucha ironía, muy poca creatividad, pero, sobre todo, muy poca música, muy poco rock.

Si los músicos de rock no se mantienen firmes en su compromiso el mismo rock, esto afecta gravemente la posición del género en la industria de la música y en la cultura en general. Si los músicos de rock comienzan a incluir otros géneros en su música y a participar en festivales que no se centran exclusivamente en el rock, esto podría hacer que el rock pierda su identidad y su influencia en la cultura.

Cada músico es libre de decidir por sí mismo si eso está bien o está mal. Pero el rock sigue en picada en el país.

Propondríamos revisar la política cultural detrás del festival, cambiar constantemente a su curador, mayor participación de la comunidad de rockeros, selección de bandas exclusivamente de Rock, Metal y derivados (Ya se incluye el Reggae y el Ska que no son parte del rock pero los rockeros los disfrutan), transparencia en la selección de bandas, aumentar el presupuesto para el festival para fortalecer su infraestructura y su cartel, entre otras cosas que podrían enriquecer la política cultural transformarla nuevamente en una plataforma de lanzamiento. Pero de nuevo, debo recalcar que cada vez que alguien propone para Rock al Parque, es vetado, ridiculizado y apartado del sistema de convocatorias, así que debemos concluir que este festival ha sido parte importante del fracaso del rock nacional.

Ok, después de todo esto, tenemos que abordar entonces tal vez la pregunta más importante de todas ¿Por qué los mismos músicos permiten la corrupción y la desconfiguración del género? ¿Por qué son los mismos músicos los que denigran y desprecian a los agentes independientes que quieren hacer algo por el rock?

No podemos generalizar y decir que todos los músicos y el público permiten que el Rock sea destruido ya que cada individuo tiene su propia opinión y postura sobre este tema. Sin embargo, en general, puede haber varios factores que contribuyen a la aparente permisividad del público y de los músicos en relación a la corrupción y al deterioro del rock en el país:

Falta de información y conciencia sobre la situación: Muchas personas pueden no estar informadas sobre los casos de corrupción y cómo esto afecta la calidad y la integridad del género, la mayoría de los músicos de rock vive pensando en cómo va a almorzar y esa necesidad les nubla otras intenciones. Además, existe una falta de conciencia sobre la importancia de luchar contra la corrupción en todas las esferas de la sociedad no solo en la música. Sencillamente muchos músicos ni siquiera conocen el problema y no les importa.

Dependencia económica: Para algunos músicos, participar en festivales como Rock al Parque puede representar una fuente importante de ingresos y una oportunidad para darse a conocer. En este sentido, pueden estar dispuestos a aceptar ciertas condiciones, incluso si no están de acuerdo con ellas.

Miedo a represalias: Algunas personas pueden tener temor a denunciar las faltas de corrupción por temor a represalias, tanto en términos de su carrera musical como en su seguridad personal ya hemos visto casos y hemos vivido en carne propia la calumnia, la grosería, el veto y el desprestigio a todo nuestro trabajo con Subterránica por parte de los corruptos a quienes denunciamos y de los músicos que son sus aliados.

Falta de opciones alternativas: En algunos casos, los músicos y el público pueden sentir que no tienen opciones alternativas a aceptar las cosas como están siendo, y por lo tanto, pueden estar dispuestos a aceptar lo que venga. ¿Cuándo han visto ustedes en la historia del rock punketos contratistas del gobierno? Bueno, bienvenidos a Colombia.

Es importante decir que al menos de manera personal, no creo que pueda existir algo llamado rock colombiano o rock latino aparte de catalogarlo por el lugar en donde se realiza, ya que algunas veces las fusiones y otras acciones lo convierten en algo que ya no es rock. Es cierto que el rock es un género musical que ha evolucionado y ha experimentado con otros estilos y géneros musicales a lo largo de su historia. Además, la música es un arte que se nutre de diferentes influencias y estilos para crear algo nuevo y original. Es por eso que es común encontrar fusiones y mezclas de géneros en muchos festivales de rock y eventos del género.

Pero es importante tener en cuenta que, a pesar de las fusiones y mezclas, el rock sigue siendo un género musical con características específicas y reconocibles, como el uso de guitarras eléctricas, batería y bajo, letras con temáticas sociales y/o políticas, entre otros elementos.

En cuanto a la existencia del rock colombiano o latino, los países y regiones tienen sus propias escenas y estilos musicales, influenciados por su contexto cultural, social y político. En este sentido, es posible hablar de una escena de rock colombiana o latina, que tenga características propias y diferenciadoras, pero es en este contexto que se puede hablar de geografía, una de las causas del fracaso del rock colombiano es que sencillamente NO SUENA A ROCK para los oídos de quienes viven afuera, ustedes no pueden pretender que un Inglés considere rock la música de Carlos Vives solo porque él la llama así, bueno, a menos que ese inglés se llame “Richard Blair” que es un agente que también contribuyó fuertemente junto a otros a la desconfiguración y transformación del rock colombiano en una “papayera eléctrica” con identidad tropical más que otra cosa.

¿Entonces… existe el rock en Colombia? Claro que sí, el país posee una escena enorme y vibrante con más de cuatro mil bandas activas, el Metal actual es una de las escenas más fuertes y por fin después de tantos años estamos siendo testigo de que una banda como Masacre comience a recoger los frutos de tantos años de carrera. Y a pesar de que nunca tuvimos bandas con presencia en los escenarios del mundo por petición de los públicos, no es tarde para construir una escena fuerte y que pise duro dentro del género y la competencia internacional, porque quieran o no, el rock como cualquier otra profesión es una competencia y así esté enmarcado dentro de las artes, su vida y su contemplación, para que sea rentable y los músicos podamos comer de nuestra música, necesitamos los concursos, los premios, las disqueras, los festivales, los medios y todo lo que rodea a la industria de la música, si no, es mejor sentarse a tocar en la sala de la casa sin tanto gasto y esfuerzo.

Lo cierto es que el rock no está muerto como algunos piensan o perciben. Aunque es cierto que ha disminuido en popularidad en comparación con otros géneros musicales como el hip hop, el reguetón o el pop, el rock sigue siendo uno de los géneros más importantes en la historia de la música y cuenta con una base de fanáticos muy leales en todo el mundo. Además, muchas bandas de rock continúan produciendo nueva música y realizando giras exitosas, lo que demuestra que el género sigue vivo y activo.

No quiero cerrar este escrito sin enviar un mensaje a los músicos que hacen rock en Colombia, porque sí los hay, muchas bandas están produciendo excelente música y se mantienen firmes en el género y en la lucha por mantenerlo vivo, el panorama no debe ser desalentador, esa precisamente es la razón de ser de Subterránica y todo este proyecto, si botáramos la toalla cada vez que alguien nos insulta, nos rechaza o nos pide que sonemos como Joe Arroyo, no llevaríamos 20 años creando espacios. A pesar de todos los problemas y de las personas que lo destruyen, podemos construir una escena fuerte, independiente y sostenible, que, si el gobierno quiere apoyar, bienvenido sea pero con las condiciones de los músicos y no de ellos, tenemos es que reorganizarnos y dejar atrás un poco el “yo” y pensar más en el “nosotros”.

@felipeszarruk, doctorando en periodismo de la Universidad Complutense de Madrid, Magister en Estudios Artísticos, músico, comunicador social, director de Subterránica.

Foto de Pexels.

Colombia

Un nuevo estudio revela los altos índices de suicidio y mala salud mental en los músicos

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La industria musical, reconocida por percepción de brillo y éxito comercial, esconde una realidad sombría: sus profesionales enfrentan riesgos elevados de problemas de salud mental, incluyendo tasas alarmantes de suicidio. Investigaciones recientes del Reino Unido y Estados Unidos han revelado que los músicos están entre los profesionales con mayor riesgo de suicidio. En el Reino Unido, los músicos ocupan el cuarto lugar entre las profesiones con mayor tasa de suicidio, solo superados por trabajadores de la construcción, oficios de acabado y trabajadores agrícolas. En el ámbito cultural, los músicos representan el grupo con mayor riesgo de suicidio, con tasas un 20% superiores a la media masculina y un alarmante 69% por encima de la media femenina según información publicada en theguardian.com

Un estudio similar realizado en Estados Unidos confirma estos altos niveles de riesgo. Las mujeres en la industria del entretenimiento, que incluye a las artistas musicales, presentan la tasa más alta de suicidio de cualquier grupo ocupacional, mientras que los hombres se ubican en el tercer lugar. El Dr. George Musgrave, profesor de Sociología Cultural y Industrias Creativas en la Universidad Goldsmiths y coautor del estudio, señala que las cifras son preocupantes: “Las mujeres en la música son claramente más vulnerables al suicidio en comparación con la población femenina general”.

Los factores que contribuyen a este alto riesgo son variados. Musgrave menciona las presiones laborales específicas que enfrentan los músicos, como la inestabilidad emocional, la exposición en redes sociales, las exigencias de las giras y el estrés emocional que estas implican. A esto se suman niveles elevados de ansiedad, depresión y abuso de sustancias, que crean un entorno propicio para el suicidio.

La problemática del suicidio no se limita a las naciones occidentales. En Corea del Sur, donde las tasas de suicidio son de las más altas del mundo, varios artistas de K-pop han perdido la vida en circunstancias similares. Musgrave apunta que, aunque no se dispone de datos concretos sobre el riesgo específico de los músicos en Corea, factores culturales como el perfeccionismo social podrían contribuir a este alto riesgo.

Ante estos hallazgos, Musgrave y su colega el Dr. Dorian Lamis abogan por la adopción de un enfoque de “cero suicidios” en las políticas relacionadas con la industria musical. Este marco implica una estrategia de siete elementos destinada a la prevención del suicidio, centrada en el cuidado integral de los profesionales del sector. “Hay evidencia contundente de que este enfoque es efectivo para reducir el suicidio en diversas poblaciones”, explica Lamis, poniendo como ejemplo la Oficina de Salud Mental de Nueva York, que logró reducir las tasas de suicidio en un 75% tras implementar esta estrategia.

Musgrave también enfatiza la necesidad de desmantelar la romantización que rodea la conexión entre la música y el suicidio. Según él, “hemos tolerado durante demasiado tiempo la mortalidad temprana y el riesgo de suicidio entre los músicos, representándolos como inherentemente torturados y sufriendo por su arte. Esto debe cambiar”.
La industria musical, a pesar de su brillo, enfrenta una crisis de salud mental que requiere atención urgente. Es esencial reconocer los factores de riesgo específicos y adoptar medidas preventivas efectivas para proteger a los profesionales de la música. Solo a través de un enfoque integral y compasivo se podrá mitigar el sufrimiento de aquellos que, con su talento, enriquecen nuestras vidas.

¿Cómo está Colombia?

La salud mental de los artistas colombianos es un tema que, aunque ha ganado visibilidad en los últimos años, aún requiere una atención más profunda y comprensiva. Diversos factores, tanto personales como profesionales, influyen en el bienestar psicológico de estos creativos, quienes, a menudo, enfrentan desafíos únicos debido a la naturaleza de su labor artística.
Un ejemplo destacado es el del artista visual Dairo Vargas Cerquera, originario de Huila. Vargas utiliza su arte no solo como una expresión personal, sino también como una herramienta para promover la salud mental a nivel global. Su obra aborda temas de memoria, identidad y bienestar mental, buscando generar conciencia y diálogo sobre la importancia de cuidar la salud psicológica.

De manera similar, el pintor y psicólogo Dorian Flórez Zuleta ha dedicado su vida a la arteterapia, combinando su pasión por el arte con su compromiso social. A través de esta práctica, ha brindado apoyo psicológico a niños y adolescentes que enfrentan problemas emocionales y sociales, demostrando el potencial del arte como medio terapéutico.
En el ámbito musical, artistas como Jessi Uribe han compartido abiertamente sus luchas con la salud mental. El reconocido cantante de música popular ha hablado sobre sus ataques de ansiedad, atribuidos a la presión constante por mantener el éxito y las exigencias de una agenda de presentaciones agotadora. Uribe ha buscado ayuda profesional, participando en terapia para abordar sus problemas personales y emocionales.

Asimismo, la cantante Silvana Estrada ha reflexionado sobre las dificultades que enfrenta su generación en relación con el amor y la salud mental. Estrada destaca la importancia de redefinir conceptos y alejarse de patrones dañinos, abogando por un amor más amable y consciente. Su enfoque en la autenticidad y la resistencia a las presiones de la industria musical resalta la necesidad de priorizar el bienestar personal sobre las expectativas comerciales.

Estos testimonios y experiencias resaltan la compleja realidad que viven muchos artistas colombianos. La constante exposición pública, las exigencias profesionales y las luchas personales pueden afectar significativamente su bienestar psicológico. Es esencial que la sociedad reconozca y apoye las necesidades de salud mental de los artistas, proporcionando espacios seguros y recursos adecuados para su cuidado y desarrollo integral.
Promover una cultura que valore y cuide la salud mental de los creativos no solo beneficia a los artistas, sino que también enriquece el panorama cultural del país, permitiendo que florezca un arte genuino y sostenible.

La escena del rock colombiano ha mostrado en los últimos años una creciente conciencia sobre la importancia de la salud mental, reflejada en la música y acciones de diversas bandas y artistas. Esta tendencia no solo busca entretener, sino también abrir espacios de reflexión y apoyo para quienes atraviesan dificultades emocionales.

¿Y en el Rock Colombiano? Ahí sí que estamos peor…

Un ejemplo destacado es la banda bogotana Mandingasea, que en marzo de 2024 lanzó el sencillo “Jodido”. Esta canción aborda de manera directa los desafíos relacionados con la salud mental, invitando a la reflexión y al reconocimiento de la importancia de este tema. La letra, escrita por el bajista Alejandro Lopera, se inspira en experiencias personales y busca sensibilizar al público sobre la necesidad de prestar atención a la salud mental. El lanzamiento fue acompañado de presentaciones en vivo y actividades que incluyeron charlas con especialistas en salud mental, demostrando el compromiso de la banda con esta causa.

Otra propuesta significativa es la de Nasa Histoires, que con su sencillo “Bugambilia” aborda la ansiedad y las luchas internas que enfrentan muchas personas. La canción utiliza la metáfora de la bugambilia para representar las emociones y pensamientos que pueden resultar abrumadores, ofreciendo una perspectiva artística sobre la experiencia de la ansiedad.
Además de la producción musical, la escena rockera colombiana ha promovido eventos y espacios dedicados a la discusión y sensibilización sobre la salud mental. Por ejemplo, se han organizado presentaciones en vivo que no solo ofrecen entretenimiento, sino que también sirven como plataformas para hablar abiertamente sobre este tema, buscando desmitificar tabúes y fomentar un ambiente de apoyo y comprensión.

La relación entre el rock y la salud mental ha sido objeto de estudio y reflexión en diversos medios. En una entrevista, se discutió cómo el rock puede ser tanto una forma de catarsis para los artistas como una herramienta de conexión para quienes escuchan, permitiendo que las personas se identifiquen y encuentren consuelo en las experiencias compartidas a través de la música.

Estos esfuerzos reflejan una tendencia positiva en la industria musical colombiana, donde el rock se convierte en un vehículo para abordar temas de salud mental, ofreciendo apoyo y creando conciencia. Es esencial que tanto artistas como público continúen promoviendo estos espacios de diálogo y reflexión, contribuyendo a una cultura más abierta y comprensiva respecto a la importancia del bienestar emocional.

@felipeszarruk

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Colombia

Nominados a la XVI Entrega de los Premios Subterranica Colombia 2025: Edición Guerreros del Rock

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Los Premios Subterránica Colombia, reconocidos como los galardones más prestigiosos del rock independiente en el país, celebran su XVI edición bajo el lema “Guerreros del Rock”. Estos premios, organizados por el colectivo de medios y gestión nacional, tienen como objetivo destacar y premiar a los artistas, bandas y proyectos más sobresalientes de la escena rockera . A lo largo de los años, han rendido homenaje a figuras emblemáticas como Elkin Ramírez, Patrick Mildenberg, 1280 Almas, Krönös, Iván Benavides, Darkness y Toño Castillo entre muchos más.

En esta edición, los nominados abarcan diversas categorías que reflejan la riqueza y diversidad del rock colombiano. A continuación, se los nominados:

CATEGORÍAS XVI ENTREGA DE PREMIOS SUBTERRÁNICA COLOMBIA A LO MEJOR DEL ROCK INDEPENDIENTE. EDICIÓN: GUERREROS DEL ROCK

  1. Homenajes Especiales Edición Guerreros del Rock por toda una vida dedicada al género y su construcción.
    • Compañía Ilimitada
    • Pacho Nieto
    • Edixón Sepúlveda
    • Jose Puentes
    • Javier Hernández
    • Hades
  2. Categorías Principales
  3. Premio Subterránica al artista del año
    • Loathsome Faith
    • Info
    • Narcorcracia
    • Legio Inferi
    • Mortis y los desalmados
  4. Premio Subterránica a la grabación o canción del año
    • Envidia – Piel Pimienta
    • Calma – Canalla
    • Se mi refugio – Pacho Gómez
    • I Awaken – Brainblast
    • Subatomic Glitchy Groove – Cosmology X
    • Thrash Manson – Steelbreath
    • Muerte Digna – R.I.P.
    • Instinto Animal – Rain of Fire
  5. Premio Subterránica al disco del año
    • Celebración del Rock Colombiano (Compilado) – Hodson Musica
    • Triunvirato – Narcocracia
    • Alma Matter – Rafa Bonilla
    • Fragments – A silent Ark
    • Resistencia – Hagalma
    • Marcando tu destino – Aura Ignis
    • The Ascencion of Darknes – Into the Dark
    • Fractal Essence – Ashes
  6. Premio Subterránica al mejor artista nuevo
    • Lengua del Desierto
    • Spectral
    • Anattema
    • Mohan
    • Nigthwatcher
  7. Categorías Individuales
  8. Premio Subterránica al mejor Guitarrista
    • Rafa Bonilla – Rafa Bonilla y los que sobram
    • Coca Buritica – Coca Buritica
    • Manfred Reimert – Cosmology X
    • Paola Camelo – Sin Pudor
    • Paula Hidalgo – Ninna leven
  9. Premio Subterránica al mejor Bajista
    • Alejandro Lopera – Mandingasea
    • Andrés Villegas – Holyforce
    • Diego Santofimio – Ärkhanon
    • Valeria Montoya -Lengua del Desierto
    • Fabián Martínez – Mag Dogs
  10. Premios Subterránica al mejor Baterísta
    • Enzo Martínez – Loathsome Faith
    • Sander Bermúdez – Legio Inferi
    • Valen Drummer – Perros de Reserva
    • Leonardo Reyes – Ärkhanon
    • Tatiana Rico – Sin Pudor
  11. Premio Subterránica a la mejor voz
    • Cero – Power of Cero
    • Dafna – Dark shadow
    • John Rodríguez – A silent ark
    • María Alejandra Tabima /Tabi – Las Tortugas Azules
    • Pacho Gomez
    • Diovanny López – Primal Sinner
  12. Categorías por Géneros
  13. Premio Subterránica al mejor artista Rock
    • Lengua del Desierto
    • Narcocracia
    • R.I.P
    • Mohan
    • Cris Cas
  14. Premio Subterránica al mejor artista Punk
    • Anattema
    • Konvixión
    • Excomulgados
    • Sin Pudor
    • A.S.M.A
    • Difamación
  15. Premio Subterránica al mejor artista Metal
    • Legio Inferi
    • Loathsome Faith
    • Cheyne Stokes
    • Holyforce
    • Steelbreath
    • Rain of Fire
  16. Premio Subterránica al mejor artista Blues o Fusiones en Rock (Reggae, Ska, Ska-Punk, Modernizaciones, folclorizaciones, electrónico, tropidelia)
    • Mortis y los desalmados
    • Las Tortugas Azules
    • Pacho Gómez
    • Fabio Rosa
    • Cosmology X
    • Mandingasea
  17. Premio Subterránica al mejor artista Hip Hop
    • Redcode
    • Penyair
    • Joes YWC
    • Selene
    • Kazu
  18. Categorías en medios de comunicación y gestión cultural
  19. Mejor gestión cultural por agente, empresa o colectivo
    • Hodson Música – Celebración del Rock Colombiano
    • Sebastián restrepo Lizarazo – Baltika Records
    • Mauro Felipe Moncada – Cali Music Hall y sus actividades paralelas.
    • Oscura Radio Tv
    • Karlos Ardila – La caja de Pandora/Hellrazor Distro
  20. Premio Subterránica al periodismo en Rock
    • Resuenan Los Ecos Del Tunjo (Documental Rock de Facatativá) – Munnopsis
    • Joel Cruz (Rugidos Disidentes, Mochila Wild, Oráculo Magazine): https://rugidosdisidentes.co/ceremonia-funesta-triste-la-honra-de-masacre-a-un-cortejo-funebre/
    • Andrés Angulo Linares (Rugidos Disidentes): https://rugidosdisidentes.co/nino-erizo-en-cancion-de-rabia-nos-expone-a-una-herida-que-no-deja-de-supurar/
    • Diego Rodríguez Saza y Eskarlata Poesía Rock en la FiLBO 2024
    • Relatos sonoros de las nuevas músicas del Tolima – Podcast
    • Elmer Alexi Cañón Lizarazo (Fotógrafo) Por sus series de fotografías en el rock colombiano.
  21. Mejor publicación digital para el rock (Radio On line,Web, blog, video blog, podcast, audiovisual)
    • El podcast del Diablo
    • The Fellowship Metal Podcast
    • Rugidos Disidentes
    • La Revolución del Rock
    • La Caja de Pandora UNDERGROUND METAL RADIO SHOW 24 años al Aire UIS Estéreo 96.9 FM
  22. Mejor publicación física de rock (Libros, revistas, fanzines)
    • El fanzine del Rock
    • David Rivera/ ‘Violines, luces y Sombras’
    • Diego Leonardo González/ ‘Bogotá, volumen y distorsión’.
    • Karloz Ardila – Memorias de Asfalto – Una aproximación al movimiento de la música subterránea en Bucaramanga (2024)
  23. Categorías especiales
  24. Legado Inmortal: Homenaje póstumo a artistas o figuras del rock colombiano que han dejado una huella imborrable.
    Será entregado a la Familia de Fernando Blacky Caballero
  25. Premio Subterránica (El premio Subterránica hace reconocimiento a bandas o agentes independientes por su excelencia en la escena musical y con los cuales Subterránica ha tenido la oportunidad de interactuar)
    En 2025 El Premio Subterránica se le entrega a OSCAR GARZÓN por su gestión fotográfica en el rock colombiano, en Subterránica y en Wacken Open Air y a IVÁN CHACÓN por sus trabajos dentro del diseño y la ilustración en el Rock Colombiano.
  26. Video del Año
    • Agua Turbia en el Desierto – Munnopsis
    • Pacho Gómez – Ser Artista es Ser humano
    • Steelbreath – Thrash Manson
    • Tomorrow – Mohan
    • Sin Pudor – Lxs Nadie
    • Cheyne Stokes – “The Master (That is Pain)
  27. Premio Subterránica a la mejor letra de una canción.
    • RIP – Muerte Digna
    • Cero – Suele el tiempo parar
    • Sabor y muerte Bazurita
    • Joes Ywc X El RedCode-Te Cobran // Infamia 2.0
    • Tras el Cristal – Desvirtual
  28. Constructores de escenarios: Premio al Mejor Festival independiente o público-privado de Rock o Metal
    • Urbana Rock
    • Convivencia Eje Rock
    • Festival Rock Hyntiba Fontibón
    • Festival Tunjuelito Territorio Rock”La ciudad es nuestra
    • Celebración del Rock Colombiano
    • Festival rock n la luna un festival
  29. Rock 360: Para el mejor uso de redes sociales, tecnología o experiencias inmersivas en la promoción del rock por una banda.
    • Narcocracia
    • Exegesis
    • Ennui
    • Mandingasea
    • La Bastarda
    • Camargo
  30. Rock en Resistencia: Para proyectos que han usado el rock como medio de protesta o cambio social.
    • Bazurita
    • Narcocracia
    • Pitbull
    • La Bastarda
    • Sin Pudor
    • Mortis y los desalmados
  31. Categorías Internacionales:
  32. Embajador del Rock Colombiano: Para artistas o agentes que han llevado la música colombiana al exterior.
    • INFO por Wacken Metal Battle
    • Tenebrarum por 70 toneladas de Metal
    • Coca Buritica por su gira en Asia
    • Perros de Reserva por su gira Canadá/Estados Unidos
    • Mad Dogs por su gira en México
  33. Reconocimiento Subterránica a los Promotores de Metal Battle Suramérica por la gestión cultural en cada país.
    • Aquelarre Metal – Alcaldía de Riobamba
    • Xaria Music
    • Manutara Producciones
    • Comunidad Metal Bolivia
    • Independent Booking Artist Manager
  34. Reconocimiento Subterránica a Wacken Open Air por la apertura de puentes culturales con Colombia y la región Norte de Suramérica.
    • Salman Sayed
    • Sascha Jan
  35. Categoría Colombianos en el Exterior.
    • Fabio Rosa
    • Cris Cas
    • Exegesis
    • Coca Buritica
    • Mateo Barrera
    • Mad Kat and the TMS

La ceremonia de premiación se llevará a cabo el 12 abril de 2025 en Ace of Spades Bogotá, donde se reconocerá el talento y la dedicación de los artistas que han contribuido al enriquecimiento de la escena rockera colombiana. Los asistentes podrán disfrutar de presentaciones en vivo, homenajes especiales y la oportunidad de conocer más sobre los proyectos nominados.

Para más información sobre el evento y las categorías, alianzas y patrocinios comunicarse a director@subterranica.com

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Festivales e Industria

Los Grammy aplican la “Rock al Parque” y desatan la ira de la comunidad del Country.

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En los Grammy 2025 hubo de todo… viejas empelota en la Alfombra Roja, un chiste sobre Colombia que puso los pelos de punta a los colombianos pero que es real, una excelente presentación de Benson Boone y por supuesto Beyoncé se llevó el premio a Mejor Álbum Country por “Cowboy Carter”. Pero esta victoria no ha sido bien recibida por la comunidad country, tanto músicos como fans, quienes se sienten profundamente ofendidos y han desatado un infierno en Internet al respecto.

Verán, para los músicos y fans, sobretodo de nicho, el respeto por los géneros musicales, sus raíces, sus formas y sus modos es muy importante, pero la academia conformada por personas de todo tipo aplico la “Rock al Parque”, es decir, al igual que el festival en Bogotá que nació para apoyar el rock pero ahora es más que todo de cumbia y folclor, y le entregó el premio a un álbum que aunque innovador y ultra producido no representa la música Country que en Los Estados Unidos es considerada casi sagrada.

La controversia comenzó cuando Taylor Swift, una figura icónica del country, anunció el premio a Beyoncé. La reacción inmediata fue de indignación y decepción. Músicos como Kacey Musgraves, Chris Stapleton y Lainey Wilson, quienes también estaban nominados, expresaron su rabia y enojo en las redes sociales y los fans no se quedaron atrás, lanzando críticas hacia la Academia de la Grabación por su decisión.

La comunidad country argumenta que el álbum de Beyoncé, aunque talentoso, no representa el género de manera auténtica. “Adoptar la estética country no convierte a un artista en genuino del género” declaró un fan en un comentario viral, en otras palabras colocarse un sombrero y meter la palabra “Cowboy” a un álbum pop no lo hace Country así como meterle guitarra electrica a un vallenato como lo hizo Carlos Vives no lo hace Rock. Esta percepción ha llevado a que los premios más importantes del country, como los Country Music Association Awards (CMA), hayan decidido dejar a Beyoncé fuera de sus nominaciones.

El escándalo ha generado un debate fuerte en Internet, con algunos fans defendiendo a Beyoncé y su “enfoque innovador” estilo Idartes, mientras que otros insisten en que el premio debería haber ido a un artista más tradicional del género. La polémica ha puesto de relieve las tensiones entre la música country tradicional y las nuevas influencias que buscan cruzar géneros.

Beyoncé se defendió su trabajo, afirmando que “el género es una palabra fría que nos mantiene en nuestro lugar como artistas”. En su discurso de aceptación, agradeció a los artistas country que colaboraron en el álbum y subrayó la importancia de romper barreras y perseguir pasiones.

La correcta clasificación de los géneros musicales ha demostrado ser más relevante que nunca, esto que sucedió obviamente ha generado desconfianza en la industria musical. Los fans y músicos del género sienten que su espacio ha sido invadido y manipulado. La precisión en la clasificación no solo facilita el descubrimiento de música para los oyentes, sino que también asegura que los artistas sean reconocidos en el género adecuado. Esto es vital para mantener la integridad y autenticidad de los géneros musicales.

Además, ya afloraron los rumores de que el premio de Beyoncé fue comprado, especialmente a la luz de las recientes controversias que rodean a figuras prominentes como P. Diddy. Estas acusaciones, si bien no confirmadas, alimentan la desconfianza y dañan la reputación de los premios. La integridad y transparencia en la selección y premiación son fundamentales para mantener la credibilidad de estos eventos, en Estados Unidos a diferencia de países como el nuestro los músicos valoran mucho estos espacios y son grandes oportunidades de crecimiento.

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